jueves, 29 de octubre de 2009

agOra, la película.

Hola a tod@s.

Hace ya un par de semanas he tenido la oportunidad, siguiendo recomendaciones, de ir al cine a ver la última película de Amenabar: Agora.

Durante estos días no he podido dejar de pensar en ella, y siento la necesidad de mandaros este correo por muchos motivos. A los que aun no habéis ido a verla quizás os empuje a ello. A los que habéis ido quizá os vuelva a hacer pensar. En cualquier caso es una forma de mostrarme a vosotros, porque en esta película se puede ver en gran parte lo que hay dentro de mí.

Sin intención de contarla resumo los temas que toca la película:

Las personas somos capaces de las mejores hazañas y de las mayores atrocidades.
La ciencia es el camino a la verdad y el conocimiento.
La guerra, fomentada siempre por los que están en el poder, no tiene ganadores.

La superstición y su hija la religión se usa y se ha usado siempre para controlar al pueblo y a su poder.
La religión católica nos debe 1500 años de evolución, de misoginia, de ciencia, de luz y de libertad, además de la vida y la obra de quienes intentaron luchar contra sus mentiras.
La religión y la ciencia se han enfrentado y se enfrentarán siempre, no porque sean semejantes o comparables en categoría, sino porque la ciencia supone un peligro intolerable para el poder de los que mandan en las iglesias.
El conocimiento es el mayor tesoro de la humanidad y debe ser protegido y preservado, sobre todo frente al propio hombre.
El hombre y su casa la tierra son insignificantemente pequeños, y a la vez extraordinariamente especiales.

Le doy las muchas gracias a Alejandro Amenabar por lo que ha contado y sobre todo por como lo ha contado. Por acercar la ciencia al gran publico e intentar despertar la curiosidad sobre asuntos que deberían ser considerados interesantes por todo el mundo, y no lo son. Por arremeter con el peso de la verdad contra los macarras de la moral y denunciar con una historia del pasado lo que estamos viviendo en el presente.

Saludos…..