miércoles, 8 de febrero de 2023

Virtual es real

Si buscamos en el diccionario la palabra virtual una de sus acepciones dice: “Que solamente existe de forma aparente y no es real”

Como habrás podido imaginar por el título de este capítulo, vamos a tener aquí una pelea con la mismísima RAE, la Real Academia Española, porque voy a tratar de explicar que no puedo estás más en desacuerdo con esa definición.

Una casa es algo que todos podemos identificar y diferenciar fácilmente. Todos -igualmente- aseguraríamos que es algo físico y tangible, y -por supuesto- absolutamente real. Sea una casa baja o un edificio alto, de ladrillos o madera, tejado plano o a dos aguas, rústica o moderna si le preguntamos a Ariadna Gavilán Montoya puede reconocerla y saber que te puedes refugiar dentro, puede imaginar que tiene distintos espacios, como habitaciones, comedor, cocina, baños y que puedes dormir en ella por las noches. Algo tan real como tú o yo.

Ahora vamos a hacer un experimento, que es coger cada una de las piezas que forma la casa, sus ladrillos, maderas, baldosas y azulejos, cubiertas de yeso o pladur… todos y cada uno de los materiales que la forman, y los vamos a disponer sobre el suelo de forma más o menos ordenada. Qué no falte nada, ni un solo clavo o tornillo. Si le preguntamos ahora a Ariadna si tenemos una casa ¿seguiría diciendo que sí? ¿Podrías decir tú que tienes una casa si tienes ese montón de materiales? ¿Podrías seguir durmiendo, viendo la tele o cocinando con ellos? Ya no, ya no hay casa. Pero ¿Si no falta ni una sola pieza de la casa, entonces donde está la casa? Hay un ingrediente que en el montón de escombros no está y en la casa sí, que es el orden, la disposición de los elementos que la componen de una determinada y precisa forma. Ergo la casa no es un elemento físico, algo que queda solo para sus componentes, si no que es un concepto virtual que flota sobre ellos si los colocamos. La casa emerge al ordenar los ladrillos.

Esto mismo lo podríamos pensar con una mesa, un coche, cualquier electrodoméstico, etc ¿Tendrías un coche si sus ruedas estuvieran en el maletero? Muy lejos no ibas a ir con él. Cada pieza suya es física, pero el coche no, porque si no las colocas no tienes coche, solo un montón de piezas en las que no te puedes desplazar.

Hace muchos años estuve en un museo de ciencia y en una vitrina había una serie de frascos de cristal, unos grandes y otros mucho más pequeños, todos conteniendo polvo de distintos colores o gases transparentes. Al leer la información sobre qué era aquello indicaba que esos eran -con total precisión- los elementos químicos que forman el cuerpo de un ser humano adulto, y que se encontraban allí exactamente en la cantidad necesaria para constituir uno. Es evidente que no era una persona, que no podías preguntarle si le gustaban las coles de Bruselas y que nadie iba a ser detenido por haber atomizado a nadie. No era nadie. Pero podría serlo. Allí estaban todos esos átomos absolutamente inertes, desprovistos de cualquier rastro de vida, pero rotundamente físicos y reales. Si tuviéramos una impresora 3D que estableciera el orden entre ellos, que catalizara las reacciones químicas necesarias para ir formando moléculas y luego las dispusiera formando células, y repitiera este infinito baile agrupándolas en tejidos, órganos, sistemas… y finalmente en una persona (algo que no es tan diferente de lo que de verdad sucede durante nuestra gestación) aportaríamos ese ingrediente mágico, orden, y tendríamos vida y persona, algo que en aquella vitrina de museo no había. Las personas somos virtuales, solo aparecemos cuando nuestro soporte físico está ordenado exquisitamente, si no adiós persona.

La gracia completa vienen aquí: Este mismo ejercicio lo podemos hace con ejemplos cuantitativamente más complejos o mucho más sencillos, y funcionará de igual manera. Por ejemplo, una sociedad humana es algo virtual que aparece cuando juntamos personas y se relacionan entre ellas. Si las separamos, no falta ni un humano, pero ya no hay sociedad. El sistema solar seguiría siéndolo si quitamos algún planeta o el sol capturara algún objeto interestelar y entra en órbita alrededor de él, pero si el sol no tuviera ni un solo cuerpo celeste al que influir gravitatoriamente de forma clara (ojo que la gravedad afecta a toda distancia) más que un sistema solar tendríamos un sol.

Si pensamos en el ladrillo de nuestra casa de antes, ese que estaba claro que aunque la casa era virtual él era real, podemos repetir el proceso de separar sus componentes a ver qué sucede. Estrellemos el ladrillo contra el suelo con fuerza y comprobaremos que hemos dejado de tener ladrillo sin que falte nada. Ya no puedo construir con él, ha desaparecido, por lo que el ladrillo también es virtual.

¿Y si bajamos aún más a lo pequeño? ¿Son los átomos reales o virtuales? En los trozos más pequeños del ladrillo que acabamos de partir, en el polvo que hayamos conseguido, hay sílice, uno de sus ingredientes principales. Esta sílice se llama en química óxido de silicio, es decir un átomo de silicio y dos de oxígeno. Si nos fijamos en el silicio, es un átomo que siempre tiene 14 protones agrupados en su núcleo. Si no fueran 14 si no 13 tendríamos aluminio con el que hacer ventanas y si tuviera 15 tendríamos fósforo que podría formar parte de nuestro ADN o nuestras membranas celulares, pero no podríamos hacer ladrillos. Las características, todas las propiedades de los átomos aparecen si juntamos el número necesario de protones (que no son nada fáciles de juntar). Los átomos son virtuales y solo aparecen cuando juntamos sus protones (por supuesto también sus neutrones y electrones) que sí son físicos…. ¿O no?

¿Hasta donde podríamos subir o bajar buscando ejemplos en lo más pequeño o lo más grande? ¿Qué es real? Yo creo que simplemente la definición del diccionario de virtual está equivocada y que todos los ejemplos de los que hemos hablado y cualquier otro que se nos ocurra trata sobre cosas reales, porque este juego, el de agrupar para conseguir cosas que antes no existían es en lo que consiste nuestro universo, nosotros y nuestra vida en él.

Si te ha interesado el tema permíteme recomendarte mi libro “Infovisión” que ahora está a la venta en Amazon sin ningún interés personal al hacerlo excepto el de comunicar la idea que encierra, similar a la de esto que acabamos de comentar, pero explicado con mayor profundidad.

Virtual es real.


Versión para escuchar: